Comenzamos la experiencia en el tablao flamenco 'Villa Rosa', un magnífico restaurante con unos bellos elementos decorativos propios de la arquitectura nazarí.
Recorrido

Callejeando por el Barrio de las Letras, pasamos por la calle Prado, la calle del Lobo y demás, así como por encima de los poemas escritos en la calzada de autores como Bécquer, Zorrilla, etc,...
Tras el paseo, volvimos al restaurante, en el cuál nos esperaban unos deliciosos aperitivos típicos españoles y pudimos entrevistar a Ildefonso.
Entrevista
-¿Qué consejos le darías a un chico
de 14 años, como yo, al que le guste escribir?
Lo primero,
que estudies, que lo vayas conjugando con otras actividades a la vez, pero que
estudies. Luego puedes asistir a talleres de escritura creativa y demás, pero
ten claro que lo demás es lo principal, la escritura va a parte.
-Bueno, lo primero que observamos
por la localización en la que estamos, es una de las claves de la novela, el
flamenco.

-Tu obra ha sido publicada en más de
40 países según he leído en tu biografía, ¿en cuál de ellos te ha hecho más
ilusión, por así decirlo?
Pues no sé,
las más interesantes creo que han sido Italia y Alemania. Las más curiosas,
China, Japón…
-¿Cómo compararías la Gran Redada
con el Holocausto de la Alemania nazi?
La verdad,
es que no son comparables, las intenciones eran parecidas, al fin y al cabo en los dos se quería acabar con una etnia o raza, pero no son iguales.
En el Holocausto nazi, a los judíos los mataban, en la Gran Redada los
encarcelaban, aunque también querían matarlos.
-¿Escribías de pequeño?
Sí, por
supuesto que escribo, desde que tengo uso de razón.
-Tu primera novela me gustó, pero la
Mano de Fátima aún más, de hecho, cada vez que veo una, me acuerdo.
-He llegado hasta la página 200, lo
que significa que tienes mi visto bueno.