Erasé una vez, un pequeño boli Bic que no sabía escribir. Era de color verde, y como nadie lo usaba y además era joven e inexperto, pues todo se juntaba. Un día que hacía mucho frío, el pequeño boli Bic se acercó a un radiador y empezó a moverse para coger calor. Justo entonces, a un niño se le cayó un papel, que fue a parar debajo del pequeño boli Bic, que vió que dejaba una mancha verde. Desde entonces, el pequeño boli Bic fue muy feliz.
Alex, el calor, venga de una mano amiga o de un radiador, consigue efectos maravillosos. Me gusta. Un beso, Paloma
ResponderEliminarHola Alex. He estado leyendo tus textos y tengo que felicitarte por ellos. Me gustan. Espero que sigas así y ojalá tengas mucha suerte! :)
ResponderEliminarMuy simpático tu escrito. Tiene una vena que promete.
ResponderEliminarOjo: "Erase una vez..." ese comienzo es de muuuuucho tiempo atrás... No olvides. Cariños.
Gracis por tus sugerencias Carlos, las acepto de todo tipo en mis comienzos y en todas las etapas.
ResponderEliminarSaludos.
Ingenio... es mucho decir para gente con 80 años que no lo intuyen en una vida; tú sabes cómo espolearlo,Alex, dar rienda suelta a la inspiración que te ha llevado a escribir algo tan ingenioso.
ResponderEliminarUn microrrelato digno de gente muy inteligente y de mayor edad. Tú con doce años demuestras inteligencia mayor; por la edad no te preocupes que disfrutarás cada año de tus seguros progresos hacia tu meta como escritor.
Por cierto Alex, qué diferente sería la vida si en vez de aplicarnos tanto en escribir con caligrafías vanidosas, fuéramos tan humildes y agradecidos de dejar esa mancha verde de esperanza que nos complicara menos la vida.
ResponderEliminarTe contesto en dos comentarios porque ¡hay que ver la profunda sabiduría que conllevan tan pocas líneas!
Muchas gracias Ignacio, por tus comentarios con un gran sentido literario sacado del alma. No serán pocos los relatos de este tipo que esten por llegar, espero k te hagan disfrutar tantto como lo hago yo escribiendolos.
ResponderEliminarSí que los disfruto,Alex. Hoy comentaba con mi actual editor, Xavier de Tusalle, sobre el descubrimiento de tu sello literario y la impresión profunda de tus letras con el mensaje subliminal de pura sabiduría de la que sencillamente te inspiras.
ResponderEliminarTu modo de expresarte no ha de ver con los contenidos formales que tan excelentemente dominas, sino con un hondo sentir de tu espíritu que te dicta las palabras.
Te sigo encantado, Alex.
Un abrazo, compañero de Letras.